Exsudoporus permagnificus Pöder
Descripción: sombrero de 5 a 8 cm de diámetro, muy irregular y frecuentemente deformado, al principio semiesférico, después convexo-aplanado; margen irregular, ondulado. Cutícula lisa y brillante, algo viscosa en tiempo húmedo, es de color rojo púrpura-carmín, se mancha de azul oscuro al dañarla, a veces aparece cubierta de una fina pruina de color rosado-blancuzco.
Poros: pequeños, redondos de color rojo anaranjado o rojo bermellón, azulean intensamente a la presión de los dedos. A veces exudan unas pequeñas gotas amarillentas. Tubos relativamente cortos de color amarillo que también azulean al corte.
Pie: Largo, cilíndrico, fibroso, con un pronunciado retículo formado por mallas bien marcadas de color rojo vivo sobre un fondo de un bonito color amarillo dorado, azulea rápidamente al tacto. Suelen aparecer varios individuos unidos por la base. A veces aparecen individuos con el pie amarillo en el que no se aprecia ningún retículo, esto ha despistado a algunos autores.
Carne: poco abundante, compacta, blanca amarillenta, al corte vira intensamente al azul, para después pasar al amarillo verdoso. Sabor dulce y olor débil a hongo.
Localización: prefiere las dehesas de suelo ácido con jaras (Cistus albidus), es de aparición temprana, quizás sea uno de los primeros boletos de otoño que nacen en nuestras dehesas ya que si se producen lluvias en verano se pueden encontrar a finales de agosto o principios de septiembre. Nace bajo alcornoque (Quercus suber) y suele ser muy abundante bajo roble melojo (Quercus pyrenaica).
Comestibilidad: desconocida aunque está descartado que sea tóxico.
Observaciones: Exsudoporus permagnificus es una especie mediterránea considerada muy rara en Europa, parece ser que además de España, en el ámbito mundial sólo es conocido en Italia y podemos afirmar que es en Extremadura donde más abunda este boleto. Pertenece a la sección Luridi y fue descrito por primera vez para España por el profesor G. Moreno en octubre de 1986, con ejemplares encontrados en Monfragüe.
Una de las características identificadoras principales es que nace muy enterrado y deformado formando grupos de varios ejemplares unidos por el pie.